Una operación perfecta
Perfecta, doy fe de ello, claramente. Pero por favor, que no me vea mamá, invéntenle cualquier cosa, ustedes saben hacerlo, pueden hacerlo.
Doy fe, expongo, cuento: una imagen vale más que mil palabras. Siempre.
-¿Encajaste al fin, huevoncito?
-Pues no sé, teniente. Venga, asómese.
-¿Te quedó grande acaso?
-Venga, hombre.
-Voy, ya voy… Pero si está bien, Echeverri, perfecto, diría yo. ¿O no, huevoncito?...
Perfecto, teniente, sin duda, el cabo Echeverri hizo un buen trabajo; éste es el mío, me queda como debe ser… No te hace justicia, hijo, diría Conchi la costurera, mi madrina, que es experta en buenas figuras, que seguramente ha contado y recontado lo poquito que sabe: Salió de aquí ¡muerto de la risa!: “Mañana le traigo la tela, ¿oyó?, sin falta.” Quería que yo le confeccionara una camisa “punk”. Salió sin afán, con la parsimonia de siempre; tuve que decirle que se apurara, que ya se estaba haciendo muy de noche, y entonces sí que apretó el paso, corrió para complacerme, para llegar rápido a su casa. Sí, madrina, corrí. Pero lo cierto es que también hubiera podido gritar mamá, duro, ¡Mamá!, ¡Mamá!, lo suficientemente duro, yo, el civil, Civil: adj. Ciudadano, relativo a la ciudad o a quienes la habitan. 2 Sociable, correcto. 3 Se dice de la persona que no es eclesiástico ni militar…
-¡Que se identifique el civil!
Que mamá no me vea, me sale ahora de todas partes, mamá no, por favor...
-¡Qué se identifique el civil!
No soy un desaparecido, mucho menos un NN… Fue una operación perfecta, cómo no: Soy un terrorista… un guerrillero muerto en combate.
-¡Qué se ajuicie el civil!
Recuerdo ahora, tal vez por lo aficionado que fui a las novelitas policiacas, que no hay crimen perfecto.
FIN
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